dibujo levemente coreografiado
Sobre la larga pared blanca que funciona como fondo del bar de Fundación Proa, un grupo de artistas (Maximiliano Murad, Dana Ferrari, Sofía Durrieu, Walter Andrade, Jimena Croceri, Sofía Berakha, Corina Arrieta y Fausto Biglione) realizará la obra de Ernesto Ballesteros. Un dibujo hecho con lápices blancos. Durante la inauguración ellos dibujarán sobre la pared siguiendo una leve coreografía, resultado de poner en práctica un dibujo de acción diseñado por el artista. A la manera de Cunningham, los dibujos levemente coreografiados de Ballesteros, se concentran en movimientos cotidianos y al ponerlos en evidencia los transforma en un gesto artístico y transcendente. Quienes tengan la fortuna de visitar el Espacio Contemporáneo el día de la inauguración podrán, además de apreciar la sutil alteración que ejerce el lápiz blanco sobre la pared blanca, también encontrarse con la relación entre los cuerpos, la alegría que la obra representa y cada uno de los elementos que hacen falta para llevar adelante una tan leve y profunda mutación del espacio.
Silencio
Témpera sobre vidrio. El gran ventanal que separa el bar de la terraza es un medio para percibir el paisaje alrededor de Proa y al mismo tiempo una entrada para la luz natural. Lorena Ventimiglia intervino sobre este elemento de pasaje. Los vidrios pintados con una leve gradación de intensidad y de transparencia. La opacidad y el color sobre el vidrio tamizan la visión e interrumpen la relación fluida entre el adentro y el afuera.
Un Drama Secreto
Encendido de la iluminación del foyer desde el principio hasta el fin de la exhibición In-Percepción, 2015
La obra tiene lugar durante todos los días y las noches. La iluminación de un sector del edificio permanece encendida todo el tiempo de la exhibición, señalando el espacio en donde la obra descansa. El pasaje entre la luz natural y la luz artificial marca al aire con un drama secreto.